admitiendo,sin embargo,que no hay fuerza
tan sublime,ni impulsos tan bestiales
que dobleguen la locura y la pasión
Abnegada, sin pensarlo se durmió,
despertando en la noche angustiada
por un sueño que murió y que nunca
en su vida....ella supo que soñó
Uhhhh... triste!
ResponderEliminarLindo pero... triste y cruel. Que feo saber que ese sueño murio...